El kéfir (originario del Cáucaso) es una leche frmentada, refrescante, con un sabor semejante alde la cuajada y una estructura similar a la de ls granos de coliflor. Se trata, sin duda, de un limento extraordinariamente saludable y, de hech, la palabra «,kéfir», deriva del turco «,keif», quesignifica «,sentirse bien»,. Dada la gran cantidadde nutrientes esenciales que contiene, el kéfir osee importantes propiedades medicinales para laprevención y curación de enfermedades. Además elborar kéfir en casa resulta un proceso fácil y sncillo. En El gran libro del kéfir, el Dr. Zitlau presenta de modo exhaustivo todos los aspecos que deben conocerse acerca de este alimento sno: orígenes históricos, investigaciones médicasy científicas recientes, estudio de sus componenes vitamínicos, minerales y oligoelementos, elabración práctica del kéfir etc. Pero sobre todo e presente libro ofrece tres importantes seccione:Prevenir y curar», con el estudio específico e más de 20 dolencias, «,Belleza y cuidados de lo pies a la cabeza», y «,Recetas exquisitas para esar en forma y tener buena figura»,. El kéfir e sumamente beneficioso para: Combatir la aneia Paliar el ardor de estómago Prevenir tato la osteoporosis como la arteriosclerosis Ativar el hígado y la eliminación de orina (pevenión de cálculos renales) Fortalecer el sistem inmunológico general Combatir la fatiga o agtamiento crónico Evitar posibles infecciones nestinales
El Gran Libro Del Kefir
Ha publicado varios libros sobre temas como los alimentos probióticos (Cómo cura el kéfir, RBA, 2012), la alimentación vegetariana infantil, la cocina a lo largo del ciclo anual o los desayunos naturales. Por medio de su blog @bonavida099.blogspot, complementa la visión dietética con aspectos filosóficos, como la actitud proactiva ante la nutrición y la prevención de la salud en la vida cotidiana.
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Jörg Zittlau
Gandhi en la empresa googletag.cmd.push(function() if(gts_ads['cabecera-sup-int'] && lazy_ads['cabecera-sup-int'] === 2) NSLec.displayAd('cabecera-sup-int'); ); Gandhi en la empresa Jörg Zittlau Editorial: Planeta
Encuestas internacionales realizadas a ejecutivos señalan al Mahatma Gandhi como un modela en cuestiones relacionadas con el éxito y el liderazgo. Él logró, como ningún otro, cautivar a las personas, convencerlas de sus principios, motivarlas y guiarlas. En este libro, el autor muestra cómo las enseñanzas de Gandhi y los principios que lo condujeron al éxito siguen siendo válidas. Jörg Zittlau, investigador en temas de estrés y conflictos, enseña lo que podemos aprender de las doctrinas de Gandhi y nos muestra cómo con paciencia, humanidad y verdadera capacidad de persuación se consigue el auténtico liderazgo.
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Jörg Zittlau
Buda para managers googletag.cmd.push(function() if(gts_ads['cabecera-sup-int'] && lazy_ads['cabecera-sup-int'] === 2) NSLec.displayAd('cabecera-sup-int'); ); Buda para managers Jörg Zittlau Editorial: Gestión 2000
Muchos ejecutivos han perdido el equilibrio entre el trabajo y la vida. El budismo, la gran religión de Asia, ofrece interesantes pistas para resolver este conflicto, porque nos enseña a concentrar nuestras fuerzas y a sentirnos realizados y safisfechos día a día. La clave de su filosofía es ser amable con nosotros mismos. Buda para managers es una guía para todas las personas que deseen utilizar conscientemente su energía mental y física, tanto en la vida profesional como en la vida privada. El autor, Jorg Zittlau, nos enseña a reenvontrar nuestro equilibrio interior con la ayuda de las enseñanzas budistas, mediante meditaciones y practicando otros ejercicios de la tradición de Extremo Oriente.
De hecho, mi segundo contacto con la kombucha tuvo lugar en ese país, en un supermercado de la cadena Whole Foods (una cadena norteamericana de productos ecológicos), cuando compré una botella de kombucha motivada por todas las cosas buenas que había leído sobre sus efectos para la salud en libros como Tradiciones culinarias de Sally Fallon o El arte de la fermentación de Sandor Katz. Su sabor me recordó al de la sidra, pero la experiencia no fue tan buena como para justificar el gasto de 5 dólares o más por botella.
El gran libro de la kombucha es sin duda un gran libro. Grande por el número de páginas (412 en su versión en castellano), por lo bien que está estructurado, y porque su contenido puede ayudar a muchas personas a incorporar a sus vidas un elemento que les ayude a reequilibrar su organismo y a conectarse con su cuerpo.
El libro se estructura en cinco partes: Primeros pasos, donde los autores explican qué es la kombucha, cuáles son sus beneficios y con qué se prepara; Manos a la obra!, donde se relata en detalle cómo se hace, los distintos métodos y posibles problemas que pueden surgir; Más que una bebida saludable, donde nos adentramos en el mundo de las segundas fermentaciones y las bebidas a base de kombucha (y con otros ingredientes); Cocinar con kombucha, un compendio de recetas donde la kombucha es un ingrediente más. También aprenderemos a utilizar el SCOBY para comer y la kombucha para producir productos cosméticos o de limpieza; y por último, La historia de la kombucha, donde los más cerebritos podrán investigar artículos científicos sobre los beneficios de la kombucha y conocer en detalle todo lo que se sabe sobre sus orígenes y cómo llegó a occidente desde su tierra natal en algún lugar de Asia.
Sin duda lo que más me gusta de este libro es que realmente constituye una herramienta para que el lector pueda preparar kombucha de manera fácil y segura, y con un resultado delicioso y apetecible.
De hecho, el libro está completamente alineado con la misión de la editorial Diente de León, que pretende que sus libros sean justamente eso: herramientas de cambio prácticas y útiles que sirvan para mejorar nuestra vida. Por eso me encanta este proyecto y no me canso de recomendaros todos sus libros.
Esta es una de las razones por las que recomiendo tanto leer este libro. El gran libro de la kombucha es riguroso y se encuentra fundamentado en décadas de experiencia investigando, preparando y enseñando a preparar kombucha.
Leyendo El gran libro de la kombucha vas a poder sentar las bases de tu conocimiento sobre la kombucha, y cuando decidas experimentar, también podrás hacerlo, porque dispondrás de las herramientas necesarias. Ya sea para preparar kombucha con panela o miel, o regalarle un SCOBY a un amigo, o argumentar si la kombucha acidifica el cuerpo o si la pueden tomar las embarazadas, todas las respuestas se encuentran en este libro.
Una mujer que transmite una gran fuerza y determinación, y que en estos momentos preside una asociación, la Kombucha Brewers International (KBI), que está trabajando duro para mantener la integridad de la kombucha en un entorno con grandes presiones por parte de las multinacionales, que quieren subirse al carro de la kombucha cambiando los procesos productivos.
El libro ya está disponible en librerías en toda España, a través de la página web de la Editorial Diente de León, y en amazon. Para distribución en Latinoamérica, contacta con la editorial en info@editorialdientedeleon.com.
Espero que te animes a comprarlo, a leerlo, y sobre todo a preparar y consumir mucha mucha kombucha. Como siempre, me encantará recibir vuestros comentarios sobre el libro y la traducción aquí mismo o en mi correo electrónico, blogdisidente@gmail.com.
II.2. La pelea por el reconocimiento jurídico En el conflicto que se relatará intervinieron, además de la SMHA, la Academia Nacional de Medicina(3) y el Ministerio de Instrucción Pública, con su organismo dependiente, el Departamento Nacional de Higiene (DNH de aquí en más)(4) (a su vez con la intervención de la Inspección General de Farmacias). El 27 de octubre de 1936, Jonás (presidente) y Semich (secretario) iniciaron el trámite de reconocimiento jurídico ante la Inspección Nacional de Justicia (Ministerio de Instrucción Pública). Unos meses antes, un artículo editorial explicitaba los motivos por los cuales se buscó luego el reconocimiento del Estado: si, por un lado, diversas profesiones (como la enseñanza, la abogacía y la propia medicina) eran "consagradas solamente cuando el Estado las distingue y recompensa", por el contrario "todo lo que el Estado no toma en cuenta ya no tiene ningún valor y quien siente o habla fuera de la tutela del Estado y en contra de las Academias que se dicen científicas, comete una herejía y debe ser despreciado". Para los homeópatas, esa situación era una burla a la pretendida "libertad de enseñanza", particularmente ejercida por la "Ciencia Médica oficial" que mantenía "a la Medicina en un estado como jamás se ha visto desde que el mundo tiene historia" (Editorial, 1936:118). Según esas palabras, existía una "frontera mágica" entre lo que era protegido por el Estado y lo que permanecía fuera. Siguiendo ese razonamiento, no sólo se premiaba a lo que ya poseía una legitimidad legal, sino que se segregaba socialmente y se perseguía a lo que estaba por fuera, lo cual afectaba al "gran público", los potenciales clientes. El Ministro de Justicia e Instrucción Pública, Dr. Jorge de la Torre(5), para poder expedirse sobre el pedido de la SMHA, pidió "opinión" al DNH, que emitió un dictamen (7 de junio de 1937, basado en un informe de la dependencia de Inspección General de Farmacias) mediante el cual aconsejaba "no acceder a lo solicitado" por las autoridades de la Sociedad Homeopática (DNH, 1937:273). Los argumentos fueron variados y apuntaban a que la homeopatía no se enseñaba "en las facultades", a un supuesto trasfondo "místico", a que operaba "cambios invisibles", se basaba en una "potencia morbífica natural", las curaciones que se le atribuían formaban parte de "fenómenos naturales de la enfermedad", los medicamentos no estaban "aprobados" por la farmacopea argentina, que si se autorizaba a la homeopatía resultaría difícil "desautorizar al curanderismo", la SMHA promovería "la instalación conjunta de dispensarios y farmacias" con claros "fines comerciales", todo esto sumado a la "predisposición de los enfermos a curarse por fuera de lo científico" (DNH, 1937:266/273). En resumen, el Departamento Nacional de Higiene se basó en un informe de su dependencia de "Inspección General de Farmacias" para aconsejar "no acceder" al reconocimiento jurídico de la SMHA, a partir de la puesta en duda de la eficacia del medicamento homeopático y la denuncia de "falta de pruebas científicas", con el consiguiente "gran peligro, en que enfermos portadores de cuadros clínicos perfectamente curables, pierdan tiempo en ensayos de medicaciones y dosis que no son las oficialmente enseñadas y aconsejadas" (DNH, 1937:272-273). Es decir, lo que pudiera haber sido un informe más bien técnico, aludía a cuestiones de relación médicopaciente, proliferación del curanderismo y aceptación de la homeopatía en círculos médicos. En septiembre de 1937, tres meses después, Semich y Jonás presentaron una respuesta al "ataque desconsiderado e injusto que el Departamento Nacional de Higiene" llevaba "contra la homeopatía, a la que desconoce su carácter científico". Consideraban a la Facultad de Medicina "exclusivista", criticaban que se pida opinión a la dirección de Farmacia y afirmaban que la farmacopea argentina estaba "atrasada", a la vez que hicieron una extensa explicación sobre de qué manera funcionaba la ley de la similitud y de los infinitesimales (aun en la alopatía) así como un extenso racconto de los lugares donde la homeopatía era reconocida (Jonás y Semich, 1937: 274 y 275). Afirmaban, además, que habían "invitado al presidente del Departamento Nacional de Higiene en varias oportunidades" para demostrar su forma de atención, que contaban "con varios miles de historias clínicas" con "curaciones exitosas", que el proyecto de "creación de centros de atención" no era con "fines de lucro", sino para "contribuir al estudio, progreso y difusión de la homeopatía", que su disciplina tendía a beneficiar a la "clase pobre", que no existía "propósito alguno de crear farmacias y consultorios con fines comerciales", a pesar de lo cual estaban "dispuestos a considerar cualquier sugestión o indicación por parte del Gobierno sobre reforma de los Estatutos proyectados" (Jonás y Semich, 1937: 288-290)(6). Los médicos homeópatas no recibieron respuesta hasta un año después de que enviaran la misiva, luego del cambio de cúpula del Poder Ejecutivo, con el nuevo Ministro de Justicia e Instrucción Pública, Dr. Jorge E. Coll(7), quien recibió a los homeópatas y pidió nuevos informes (atendiendo a las objeciones del DNH) a la Academia de Medicina y a las embajadas argentinas en EE.UU. y Alemania (Coll, 1938). Las embajadas remitieron informes favorables a la Homeopatía (Informe de la Embajada Argentina en Washington, febrero de 1939; Informe del Ministerio de Relaciones de Alemania a la Embajada Argentina, marzo de 1939), ya que indicaban en ellos formación y atención legal en Estados Unidos y Alemania, así como legislación específica para los fármacos en este último. Por su parte, la Academia Nacional de Medicina (el 6 de junio de 1939) emitió un dictamen explicitando que no la consideraba "científica", que sus escuelas en otras partes del mundo "existen" -"aunque cada vez menos numerosas"-, y que "esta Academia piensa que a los médicos diplomados en Universidades nacionales no puede prohibírseles su aplicación" (Academia de Medicina, 1939:293)(8). Con el aval de la Academia y los informes favorables de las embajadas de EE.UU. y Alemania, el camino parecía despejado. Sin embargo, poco después de que la Academia se expidiera, el DNH intentó una última jugada: prohibir la venta de medicamentos homeopáticos. 2ff7e9595c
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